Es una de las mejores piedras para trabajar el llamado "mal de ojo". Este fósil de origen animal es especial, para desviar las malas intenciones y miradas de las personas hacia nosotros.
Es un poderoso y potente amuleto ya que ayuda a disolver hechizos y mal de ojo. Aporta bienestar, alegría, seguridad y fe en uno mismo así como también ayuda a inducir sueños proféticos.
Las medidas e intensidad del color varían según cada pieza, cada mineral es único.